Agua Fita Santa Fé

Hace unos días y aprovechando que era San Jorge, un buen pretexto pasa salir por el monte, esta vez cerca de la ciudad. Comento que desde hace un tiempo me salpicaba la curiosidad por conocer una fuente de aguas curativas cerca de Zaragoza y muy afamada en su momento; esto surgió tras leer un excelente trabajo realizado por Paco Iturbe, bioquímico y divulgador ambiental denominado "Fuentes curativas de Zaragoza. Naturaleza mágica" y que lo recomiendo, os dejo el enlace para los que tengan interés en ampliar información https://www.zaragoza.es/contenidos/medioambiente/cda/fuentescurativas.pdf

 De todas aquellas antiguas fuentes a las que se les atribuía extraordinarios beneficios para la salud la que más me impactó, tanto por la fama que tuvo como por sus propiedades medicinales es el Manantial de Agua Fita, en el sitio denominado Acampo Fita ubicado las proximidades del Monasterio de Santa Fé, en el barrio zaragozano del mismo nombre, entre las localidades de Cuarte de Huerva y Cadrete.

Monasterio de Santa Fé

 El entorno la depresión del rio Huerva salvo la ribera a la altura de éstas localidades es de un paisaje estepario, actualmente utilizada para cultivos de secano. Los suelos del lugar son áridos y hay escasas lluvias pero son muy ricos en minerales y por tanto las aguas que se filtran poseen una característica especial, hecho que solamente en muy contados sitios de la geografía aragonesa se producen.

Aridéz de los suelos con escasa vegetación

Rocas minerales características de la estepa

El acampo era un lugar de pastoreo del ganado perteneciente al cercano monasterio cistercience que actualmente está abandonado y al borde de la riuna. El terreno seria aquirido tras la Desamortización de Mediazabal por manos particulares y es a mediados del siglo XIX cuando pasa a ser propiedad de Francisco Fita, dichos terrenos fueron utilizados para pastos y caza, cuando en el año 1887 un hijo de éste, Bernardo Fita, en busca de un abrevadero para el ganado en una zona que aparentaba algo de humedad realiza una excavación y encuentra agua la misma que el ganado lo rechazaría y se pudo comprobar entonces que su sabor resultó desagadable pues tenia un sabor muy salado. Para determinar su composición fue enviada una muestra a un laboratorio en Montpellier ya que al beberla producia efectos laxantes.

Pradera Acampo Fita

 Fue en el año 1939, cuando los herederos de Fita encargan otro análisis de las aguas del manantial, está vez  al Instituto Nacional de Higiene de Zaragoza , en el cual mediante resolución es declarada de utilidad pública y mineromedicinal, por lo que los propietarios del terreno empiezan a comercializarla con la denominación "Agua Fita Santa Fé" o "Agua mineral y purgante Fita Santa Fé", que llegó a alcanzar la fama mundial.

Desde el manantial se trasladaba el agua en cubas hacia Zaragoza en la calle Madre Sacramento 28 donde erá filtrada y embotellada para ser distribuida por toda España donde era vendida en las farmacias de aquella época.

En la década de los 40 y 50 es cuando alcanzaría su mayor florecimiento, llegando a ser distribuida en paises lejanos principalmente en sudamerica como por ejemplo Brasil, Venezuela, Argentina,  Chile, tambien en México y Cuba así como en la India y en Filipinas, etc.

Entrados ya los años 70 y con el auge de la industria farmacéutica los productos naturales dejarian de ser competencia y mas pronto que tarde fueron mermando su producción hasta su cierre definitivo.

 

Publicidad de la época

En ese tiempo las "fómulas" o "preparaciones" utilizadas como medicinales estaban de moda, debido a que la industria farmaceutica no estaba aún desarrollada y apenas existían medicamentos básicos para las dolencias, por lo que era habitual que la gente emplease este tipo de productos. 

Composición de Agua Fita Santa Fé

Sin embargo Agua Fita no era ninguna fórmula inventada ni nada por el estilo, pues poseía una importante concentración de sales minerales y eso la hacia única además por ser natural. 

 

Cabe recordar que ésta agua milagrosa fué utilizada para varias dolencias entre ellas para tratar afectacioes del hígado, reumatismo, estreñimiento, obesidad, piel, riñon, estómago, hemorroides... es decir una auténtica panacea.

A manera personal y como profesional de la salud me permito hacer algunas consideraciones al respecto sobre las potenciales propiedades medicinales.

A día de hoy sabemos que los efectos de  las soluciones salinas en el organismo producen una retención de líquidos a nivel intestinal, estos líquidos disuelven las materias fecales y favorecen a que las deposiciones sean más blandas, además éstas soluciones salinas pruducen un aumento de la secresión de colecistoquinina que es una hormona que estimula la actividad digestiva tanto de las grasas como de las proteinas; dicho de otra manera Agua Fita tendría efectos laxantes por el simple hecho de su composición mineral siendo de utilidad en casos de estreñimiento y por ende para la prevención de hemorroides. 

Otra de sus indicaciones era para el alivio problemas de estomacales con lo que también comparto este hecho ya que el sulfato de magnesio uno de sus componentes así como las sales de sodio están indicadas para el alivio de la acidéz gástrica y la mala digestión, como ejemplo práctico cito a "Sal de Andrews" ya que está compuesto también por sales sódicas y magnésicas y por tanto igual indicación.

Con lo relacionado al tema obesidad, puedo decir que no existen evidencias para que una solución salina o mineral contribuyan a ello, más bien considero este hecho como una simple creencia popular. Tampoco comparto la utilidad indicada para problemas renales, ya que la ingesta de una solución hipertónica es decir rica en solutos como Agua Fita dependiendo de la dosis y del tiempo de consumo pueden desencadenar un desequilibrio hidroelectrolítico derivando en una afectación renal llegando incluso a producir un fallo renal esto en una persona sana, y en una persona que ya tiene un grado de enfermedad renal las consecuencias producidas por el desequilibrio electrolítico entre el sodio y el potasio pueden conllevar a afectación de otros órganos.

Sobre el tema de enfermedades del hígado, entiendo por ello la insuficiencia hepática, si bien es cierto que en pacientes con cirrosis hepática generalmente presentan una alta prevalencia de desnutrición, por lo es indispensable una adecuada nutrición y para ello entre otras cosas es importante el aporte de micronutrientes como por ejemplo el calcio, fósforo, sodio, potasio, cloro, magnesio, etc. de tal manera que, una ingesta de una solución mineral en este caso Agua Fita, contribuiría en parte a reponer estos déficits nutricionales en la enfermedad hepática, sin embargo hay que tener en cuenta que, además de minerales estos pacientes necesitan macronutrientes y vitaminas oligoelementos. Hago incapié en que hablo solamente del tema nutrucional para enfermedades hepáticas no hablo de un tratamiento farmacológico.

Sobre las enfermedades de la piel, es cierto que las sales minerales tienen propiedades cosméticas y son de utilidad para el tratamiento de diversos problemas dermatológicos, de hecho se han utilizado desde hace mucho tiempo, un ejemplo de ello son las aguas salinas del Mar Muerto utilizadas sobre todo en hidroterápia y en la medicina natural.

En el libro de Iturbe y Ruiz se recogen algunos testimonios de personas que dicen fueron beneficiadas por sus bondades al beber Agua Fita.

Estado actual de la caseta donde se encuentra la fuente

 Actualmente la fuente se encuentra en total abandono y sus aguas siguen su cauce natural hacia las entrañas de la tierra. Hace no mucho tiempo parece ser que un colectivo local intenta reactivar el manantial lo que me parece una excelente noticia, esperemos que así sea.